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F. Bartolomé escribió en (31/07/2024) ♦ Templo Mayor ♦ ¡A H, CARAY! Quienes asistieron a la conferencia de prensa de Claudia Sheinbaum ayer se quedaron con una terrible duda: ¿acaso la Presidenta electa mandó a la congeladora las 18 iniciativas de reforma de AMLO? LA PREGUNTA no es ociosa toda vez que cuando le preguntaron a la morenista sobre las iniciativas de reforma que comenzarán a discutirse mañana en San Lázaro, comentó sin titubeos: la prioridad son la reforma judicial, la de pueblos indígenas y la que eleva a rango constitucional los programas sociales de la 4T. ¿Y LAS INICIATIVAS que ya están listas en comisiones? La Presideta electa simplemente no dio fecha y dijo algo así como: “pues ya veremos”. Esa apatía por las reformas que se andan empujando desde Palacio Nacional confirma que Sheinbaum tiene sus propias prioridades en cuestiones de reformas. DADO QUE en varios sectores esperan señales de independencia de la próxima mandataria respecto de su mentor, este aparente desinterés sería una buena noticia. |
31 julio, 2024
30 julio, 2024
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D.n Enrique Gómez Orozco escribió en (30/07/2024) ♦ Lenia la (mala) vendedora ♦ A Lenia Batres le fue mal en Guanajuato, como le va mal en tantas ocasiones cuando participa en el Supremo Tribunal de Justicia de la Nación como Ministra. Sabemos de sus gustos estridentes para enfrentar a vecinas, algo imposible de empatar con la sobriedad de su cargo. Lenia vino a Guanajuato al Congreso a vender la propuesta de la Reforma al Poder Judicial. Para ello se valió de lo que le sale bien: los insultos. Calificó a la justicia de “elitista, cara, desgastante, corrupta, insensible, humillante, lenta y onerosa”. A jueces y miembros del PJ no les gustó la retahíla de calificativos. Con pancartas en su contra le gritaron “¡Fuera, fuera!”. Tuvieron que salir al quite los miembros de Morena, quienes se apuraron a defender lo indefendible. Hay muchas preguntas para la ministra Lenia. ¿Es su papel como ministra hacer propaganda partidista y echarle leña, fuego y… a todos sus compañeras ministras, ministros, magistrados, magistradas, jueces, funcionarias y funcionarios del PJ? ¿Si quiere vender la idea de un cambio para acabar con todas las cosas que están mal, el método no es plantear lo nuevo y sus beneficios? En cada presentación que tiene le va mal. Los abucheos, los insultos y la gritería impiden cualquier diálogo entre legisladores, miembros del PJ y la ministra. Hay quienes dan por hecha la consumación de la reforma de AMLO porque el partido en el poder alcanzaría la mayoría absoluta del 74% en la Cámara de Diputados. Algo que está en veremos en el Tribunal Electoral. La UNAM, que aún es el centro más importante del país en conocimiento e impartición de cultura jurídica, está en contra de la Reforma porque advierte —como todos— que la intención es disminuir o eliminar la independencia de nuestros juzgadores. Así como Lenia no tiene la menor idea de lo que significa su función y hace muy mal la tarea de vender una reforma inútil y convenenciera para el Poder Ejecutivo, el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí, da cátedra sobre la barbaridad de la reforma. Todos escuchamos a quien sí sabe. Tan solo pretender la reducción de salarios de jueces, magistrados y ministros resultaría en una huelga inmediata del PJ, porque en la ley está establecido que las remuneraciones no pueden ser disminuidas en lo privado y lo público, a menos que haya acuerdo de las partes. Pensar que todos en el PJ van a aceptar de buena gana que les reduzcan su ingreso después de haberlos insultado, después de innumerables agresiones verbales, resulta ingenuo por no decir infantil. En Morena deben entender que la imposición no es la mejor forma de gobernar. La propia doctora Sheinbaum tendría que enfrentar la crisis institucional más grande de nuestra historia contemporánea. Un paro del PJ pondría de cabeza al país y daría al traste con el arranque de sexenio. Sabemos que la reforma es producto de una venganza de López Obrador porque los jueces no se doblaron a sus caprichos, en particular Norma Piña, la ministra presidenta de la Corte. Es cierto que se necesitan cambios en el PJ, para hacerlo más eficaz, expedito y justo en sus sentencias. Pero transformarlo no es a manotazos y con majaderías. Hay muchísimos cambios técnicos que pueden lograrse con nuevas tecnologías; las leyes pueden perfeccionarse. Los procesos pueden digitalizarse con la seguridad necesaria. Lo de elegir jueces es una broma de mal gusto. Amén. |
29 julio, 2024
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D.n Jesús Silva-Herzog Márquez escribió en (29/07/2024) ♦ Cambio de régimen ♦ L as democracias ya no mueren como solían hacerlo. No caen de pronto con un golpe de estado que suspende libertades, prohíbe partidos y cancela elecciones. No desaparecen con la imposición violenta de una junta militar. Las democracias de ahora mueren con votos. Lo hemos visto en muchas partes del mundo: gobiernos democráticamente electos emplean los recursos constitucionales para ir desmontando contrapesos e imponer un dominio sin restricciones. La corrosión puede ser lenta y pasar como una serie de medidas inofensivas, pero la ruta es bastante clara: se libra una guerra simbólica contra aquellos a los que se pinta como enemigos de la nación, se nulifican los órganos de control, se hostiga a la crítica, se colonizan las instancias de neutralidad, se deslegitima a la oposición. Debilitándose poco a poco, los contrapoderes se vuelven irrelevantes. El poder que surgió de los votos puede ya hacer lo que quiera. Es capaz de rehacer las reglas de juego a su antojo. No necesita pacto alguno para cambiar la constitución. No tiene consecuencia alguna el violarla. Así se instauran las autocracias electivas. ¿Qué avance ha tenido el proceso de autocratización en México? ¿Podemos decir que se ha dado ya un cambio de régimen? De acuerdo con algunas evaluaciones internacionales, nuestro país pasó hace unos años de una democracia defectuosa a un régimen híbrido: un sistema que preserva notas democráticas, pero en el que avanzan los rasgos autoritarios. Tras las elecciones de junio el panorama democrático es mucho más sombrío. Es probable que el oficialismo se haga del control de una mayoría suficiente para cambiar la constitución y que use ese impulso para constitucionalizar un predominio sin límites. Pero, independientemente de la suerte de la funesta reforma judicial, el avance autocrático parece innegable. Hay un nuevo partido oficial, un partido ligado a la estructura del gobierno que es, en muchas partes del país, el único plato en el menú. Como lo veíamos hace unas cuantas décadas, podemos recorrer ciudades y pueblos donde solo aparece la propaganda del partido gobernante. Y podemos ver también que los gobiernos peor evaluados no reciben el castigo de la alternancia. No es antidemocrático, por supuesto, tener un gobierno de mayoría clara, un gobierno unificado en el que presidencia y congreso pertenezcan al mismo partido político. Lo que resulta antidemocrático es que, en contra del principio proporcional, se otorgue a la coalición oficialista una representación excesiva. Antidemocrático es que se tergiverse el orden de las preferencias ciudadanas para favorecer a la coalición gobernante. Antidemocrático que un equipo sea capaz de rehacer las reglas fundamentales del juego, sin necesidad de pactar la plataforma común. Antidemocrático sería que se rehiciera la constitución para acoplarla al antojo del presidente saliente y que se desgajara el fundamento de la autonomía y el profesionalismo de uno de los poderes del Estado. Pero no tenemos que adelantarnos para imaginar lo que podría pasar en el futuro cercano. Lo que ya tenemos frente a nosotros es un régimen político distinto al del muy imperfecto pluralismo que implantó la transición. El historiador Rafael Rojas ha publicado en Letras libres un ensayo interesante en el que muestra su preocupación por esta lectura que advierte el cambio de régimen. Cree que se adelanta a cambios que aún no se concretan y que puede estimular estrategias derrotistas en la oposición. Tiene razón cuando busca una caracterización más precisa del nuevo régimen. Pero no habrá comprensión, ni estrategia sensata si no se advierte que está formándose un nuevo régimen. Un régimen con extensos respaldos sociales que es, al mismo tiempo, profundamente antiliberal. Hay que llamar a las cosas por su nombre y el régimen que despunta es un autoritarismo de nuevo cuño. Por supuesto, no está en proceso de formarse una dictadura castrista en nuestro país. Aunque se escuchan en él muchos ecos del viejo priismo, tiene características propias: representa una política personalista que rechaza la intermediación corporativa, desprecia no solamente la sustancia sino las formas constitucionales. Habrá que ir afinando el retrato del nuevo régimen, pero sería engañarnos si no reconocemos que pisamos ya otro terreno. |
28 julio, 2024
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D.n Gabriel Zaid escribió en (28/07/2024) ♦ Por qué votaron así ♦ E l desarrollo institucional del INE, el Trife y la Suprema Corte, así como su valor civil frente al acoso presidencial, inspiran confianza en que los resultados oficiales de las elecciones del 2 de junio reflejan lo que votaron los votantes. Esto deja como problema entender por qué votaron así. La violencia, la corrupción y la ineptitud de este sexenio hacían esperar un voto de castigo, no una ovación. 1. En las encuestas comparativas, puede observarse cierta correlación entre los resultados de dos preguntas: “¿Conoce usted a ...?” y “¿Cómo lo califica?” Las personas más conocidas son las mejor calificadas. Como si la gente pensara: “Si sale tanto en la televisión, la radio, los periódicos y las redes sociales, debe de ser alguien importante; algo bueno debe de tener. Y más si suena más”. Shirley Temple, Arnold Schwarzenegger, Ronald Reagan, Donald Trump y muchos otros han capitalizado su presencia mediática para alcanzar posiciones políticas. La presencia constante de López Obrador en los medios induce la opinión favorable que se tiene de él, aunque mienta, insulte o aburra. La presencia de Claudia como jefa del gobierno de la Ciudad de México (más de cuatro años); la anticipación con que fue destapada (casi tres años antes de las elecciones); dieron una gran ventaja a Claudia sobre Xóchitl, que era desconocida hasta hace un año. Que el presidente en persona haga campaña por su candidata pesa. 2. Las encuestas indicaban que ganaría Claudia, con una ventaja sobre Xóchitl que parecía disminuir hacia el empate o, más aún: la derrota de Claudia. La inesperada ventaja del 32% que obtuvo Claudia en las urnas fue superior a la que obtenía en las encuestas. Es sorprendente. Implica que millones de votantes cambiaron de opinión a última hora o que muchos entrevistados ocultaron su preferencia por la candidata oficial: quizá por vergüenza frente al entrevistador. 3. El paternalismo genera agradecimiento filial. El populismo dadivoso que apapacha a los votantes con esto y con aquello, genera votos devotos. Si los opositores prometieran a los votantes: “Voy a darte lo mismo o más que Morena”; muchos votantes pensarían: “Más vale malo por conocido que bueno por conocer”. 4. Donde los narcos intervinieron en la votación, seguramente fue contra Xóchitl, que fue valiente, y hasta temeraria, al anunciar que iba contra ellos. 5. Según México Evalúa (“No hubo voto de castigo en los municipios más violentos”, YouTube), de los 50 municipios del país con más homicidios dolosos por arma de fuego, en 33 ganó el mismo partido en 2024 que en 2021. Y de los 17 que cambiaron, 8 cambiaron a Morena. Se diría que la inseguridad pesó menos en el voto [negativamente] que los programas sociales [positivamente]. 6. No todos los votantes ven a las autoridades como conciudadanos. La investidura impone respeto, cuando no temor. Hay cierta tendencia a excusar los abusos presidenciales: “El Señor Presidente no estaba enterado”. “Su equipo lo traiciona.” “No tuvo más remedio que hacerlo.” Como si el abuso fuera una prerrogativa del poder y la posición (“Papá nos maltrata, pero es papá”). López Obrador ha intervenido abusivamente en todo el proceso electoral. “Pues sí… pero es el presidente”. 7. Hay quienes creen que el voto no es tan secreto, que de alguna manera el gobierno puede enterarse de quiénes votan en contra y castigarlos. 8. No todos votan para gobernar el país: para cambiar o mantener el rumbo democráticamente. Hay quienes votan con el ánimo de atinar. Se sienten ganadores si votaron por el que ganó y perdedores si votaron por el que perdió, aunque haya sido el mejor. 9. Los líderes partidarios (en México) no pierden cuando su partido pierde. Actúan como si el candidato fuera el único responsable de ganar o perder. Quieren quedarse ahí, con la esperanza de que en las siguientes elecciones les vaya mejor, con un candidato mejor. 10. El voto universal obliga a votar a millones que no tienen especial interés en hacerlo; que ven la política como algo remoto, que ni siquiera entienden; que dan poco valor a su voto y no tienen inconveniente en abstenerse o votar por el candidato más visible o más generoso con regalos. Que piensan que todos los políticos son iguales, y se resignan a aceptar que “con estos bueyes hay que arar”. |
27 julio, 2024
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D.n Armando Fuentes Aguirre escribió en (27/07/2024) ♦ Consignas ♦ A lguna vez tuve la honra de ser actor. Quizá lo sigo siendo. Ignacio López Tarso asistió a una de mis conferencias. Al final fui a saludarlo y a expresarle mi admiración. Me felicitó y me dijo: “Usted no es un conferencista. Es un actor”. Todos lo somos, pienso. Salimos cada mañana al mundo llevando la persona, máscara del actor, y decimos cosas como: “¡Qué gusto saludarte!”, “Es un honor haberlo conocido”, o: “¡Qué bien te ves!”, actuadas todas al modo de un papel de teatro. Uno desempeñé en mi primera juventud. Fue en “La antorcha escondida” de D’Annunzio, un dramón —”culebrón” se dice en el argot teatral— en el cual mueren hasta el tramoyista, el boletero y el apuntador. Ese papel era el de “Sombra que pasa”. Mi única actuación —muda, por supuesto— consistía en pasar furtivamente tras una ventana. Recuerdo es ése de otros tiempos para éste que es el de recordar. Pues bien: tenemos en México una sombra que no pasa. Es, lo habrán adivinado ya mis cuatro perspicaces lectores, la de López Obrador. Me preocupa ver el obsecuente modo en que Claudia Sheinbaum acata las consignas de quien le dio el bastón, pero al parecer no el mando. La futura Presidenta sigue al pie de la letra los dictados de su antecesor, así tengan la forma de recomendaciones. Lo mostró al hacer el nuevo nombramiento de Zoé Robledo como director del IMSS, o cualquiera que sea ahora el apelativo de esa precaria institución. En el norte se empleaba el término “anca” para decir “en casa de”. Hubo en mi ciudad dos hospederías, propiedad la primera de un inglés, Brown, y la otra de un español, Garce. Diversión inocente de mis antepasados, que hacía ruborizar a mis antepasadas, era decir: “Voy anca Brown”, o: “Va anca Garce”. Dudo que al término de su sexenio AMLO se vaya anca La Chingada y ahí se quede quieto, cruzadito de brazos como niño bueno, al margen de toda suerte de política. Después de apurar en dos ocasiones las hieles del no poder, pudo gozar al fin las mieles del poder, y será muy difícil que renuncie a ellas. Gravitará esa sombra sobre quien lo sucederá. Pero si Sheinbaum no se la sacude quedará en la historia como la mujer que les falló a las mujeres, como la Presidenta que se sometió a un hombre al modo antiguo. Será, ella también, una sombra que pasa. |
26 julio, 2024
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D.n Juan Villoro escribió en (26/07/2024) ♦ El suicidio que no cesa ♦ E l sábado 6 de diciembre de 1873, a los 24 años, el poeta Manuel Acuña protagonizó el suicidio más famoso de la literatura mexicana. Fue encontrado por su amigo Juan de Dios Peza, entonces de 21 años, en el cuarto que ocupaba en la Facultad de Medicina, antigua sede de la Inquisición, donde seguía sin entusiasmo la carrera que justificaba su estancia en la capital. El aire despedía el olor a almendras del cianuro. Su decisión se explicaba en varias cartas y a Juan de Dios le había dicho que emprendería un largo viaje. Manuel Acuña no actuó por impulso sino con el calculado rigor que animaba su mejor poema: “Ante un cadáver”. Un día antes, los amigos habían ido a la Alameda y se despidieron ante un zaguán que Peza no quiso identificar. José Emilio Pacheco atribuye este silencio al “pudor mexicano”. Sin embargo, la indiscreta posteridad agregó una sospecha: Juan de Dios quiso proteger a la inquilina de esa casa, Rosario de la Peña, a quien Acuña dedicó su célebre “Nocturno”. Así se perfeccionó la leyenda del poeta despechado: Rosario lo rechazó y él no encontró otro consuelo que la muerte. Recuerdo lo que Álvaro Mutis decía a propósito del romanticismo: “El poeta enamorado no regala bombones: ¡bebe arsénico, viejo!”. En 1774, en Las tribulaciones del joven Werther, Goethe abordó el suicidio como el dramático tributo de quien ama sin remedio. Escrita por un autor de 25 años, la novela fue un best seller instantáneo. Traducida al francés, cautivó a Napoleón al grado de llevarla consigo al campo de batalla. El “wertherismo” puso de moda el saco azul y el chaleco amarillo del protagonista, y la costumbre de morir de amor. En el imaginario mexicano, Acuña es nuestro joven Werther. Nacido en Saltillo, en 1849, encarna el arquetipo romántico. Padeció la pobreza del estudiante provinciano en la capital y midió su taquicardia en versos hasta que el dolor pudo más que la escritura. Su suicidio lo malquistó con la Iglesia y lo convirtió en ídolo nacional. La población de Las Vacas, Coahuila, es actualmente Ciudad Acuña, y en Guadalajara la casa de gobierno se ubica en la calle que lleva su nombre. Repudiado por la crítica como un versificador sentimental, triunfó en el gusto popular. Recuerdo a los declamadores de mi infancia que subían a los camiones a recitar a cambio de unos pesos: “Pues bien, yo necesito/ decirte que te adoro, / decirte que te quiero/ con todo el corazón...”. Pocas veces la suerte de un texto ha dependido tanto de su dedicatoria. La fama póstuma de Acuña se cimentó con dos palabras, “a Rosario”, destinadas a la mujer que fue cortejada por Guillermo Prieto y José Martí y que reunía en su salón a Ignacio Manuel Altamirano, Ignacio Ramírez, Vicente Riva Palacio y Luis G. Urbina. Musa ideal, Rosario fue la prometida de un coronel que murió en un duelo, se comprometió con un poeta que no pudo consumar el matrimonio por estar enfermo de sífilis y murió soltera. En cada episodio confirmó que el amor aumenta al no alcanzarse. No es casual que Acuña le dedicara su “Nocturno”; sin embargo, en su extraordinaria novela El pasado, Víctor Palomo explica de otro modo lo ocurrido. El autor se adentró en las hemerotecas hasta dominar el siglo XIX con la confianza de quien dejó ahí sus pantuflas. Supe del libro por un ensayo de Marco Antonio Campos, gran conocedor de las biografías de los poetas mexicanos. Palomo ganó en Coahuila el Premio Altamirano y su novela contó con una edición local que se agotó de inmediato. Durante un tiempo, encontrar un ejemplar de El pasado era tan difícil como resolver el enigma que aborda. Por suerte, Grijalbo acaba de reeditar esta historia apasionante. No contaré el final de una trama que depende del misterio. Me limito a evocar un pasaje clave. Palomo recrea el salón de Rosario en el que se celebran torneos poéticos. El joven Acuña es admitido y se ve obligado a participar; le piden que improvise un texto y transcribe uno que sabe de memoria; por deferencia, lo dedica a la anfitriona. Sin embargo, de acuerdo con Palomo, la destinataria es otra persona y esos versos cuentan un drama diferente. Narrada con la vibrante intensidad de quien parece haber respirado, calle por calle, el antiguo aire de la capital, El pasado recupera al poeta que selló su destino al tomar cianuro y demuestra que nada es tan asombroso como lo que ya sucedió pero no supimos entender. |
25 julio, 2024
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D.n Armando Fuentes Aguirre escribió en (25/07/2024) ♦ Mentirosos ♦ P or regla general las mujeres deben cargar con un hombre. Claudia Sheinbaum tendrá que cargar dos: Andrés Manuel López Obrador y —si sale electo— Donald Trump. Ambos son aves de la misma pluma; los dos son mentirosos contumaces, sistemáticos violadores de la ley, enemigos de las instituciones, injuriosos, con ansias irrefrenables de dominación. Pesa ya sobre la futura Presidenta una responsabilidad muy grande: la de representar a la mujer. Si obedece las consignas de AMLO, si se vuelve una mera copia del caudillo, hará retroceder por décadas la esforzada lucha por la igualdad de género. Y si deja —en su caso— que el misógino Trump la someta y avasalle en la misma forma que a López sometió y avasalló, será causa de que el prepotente magnate abaje a México y lo humille como hizo una y otra vez durante el régimen del tabasqueño. “¡No te dejes, Enriqueta!”. En tiempos pasados se utilizó esa frase para incitar a alguien a defenderse frente a un ataque, abuso o atropello. Tal expresión tuvo su origen en un salón de clases. La maestra —se llamaba Enriqueta— le pidió a un alumno que dijera el nombre de alguna isla situada en el Océano Índico. “Sumatra” —respondió el muchacho. Otro estudiante, distraído, oyó esa palabra; pensó que el compañero estaba insultando a la mentora y la animó con énfasis: “¡No te dejes, Enriqueta!”. Pues bien; habrá que decirle desde ahora a la nueva mandataria: “¡No te dejes, Claudia!”. Todos la apoyaremos si se da la circunstancia de que López pretenda imponer su voluntad sobre ella, o de que Trump quiera dar trato de república bananera a nuestro país. “¡No te dejes, Enriqueta!”. |
24 julio, 2024
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D.n Sergio Sarmiento escribió en (24/07/2024) ♦ Insultar al rival ♦ U na de las reglas de propaganda de Joseph Goebbels es que debe criticarse constantemente a los opositores. Otra señala que hay que escoger a un enemigo especial para vilipendiarlo. Por eso Donald Trump pasó de insultar a Joe Biden, su entonces rival, en el mitin del pasado 20 de julio en Grand Rapids, Michigan, cuando lo llamó “estúpido” e “individuo de bajo IQ”, a descalificar a Kamala Harris, su casi segura nueva rival, a quien ya ha ridiculizado como “perversa y tonta”. Es la misma estrategia de su amigo Andrés Manuel López Obrador para enfrentar a rivales políticos. A Ricardo Anaya en 2018, por ejemplo, lo llamaba Ricky Riquín Canallín y lo señalaba como un ladrón ante el cual había que cuidar la cartera. A Xóchitl Gálvez la ha calificado de “ladina”, “clasista” y “racista”, entre muchas otras cosas. Insultar a los rivales no es una costumbre nueva. A lo largo de la historia los gobernantes, en especial los dictadores, han descalificado a sus rivales o enemigos. Hay quien dice que el insulto es un avance sobre las otras posibles opciones. A Sigmund Freud se le atribuye la frase “El primer humano que lanzó un insulto en lugar de una piedra fue el fundador de la civilización”. En realidad, la expresión no es suya, sino que él la citó de otro autor, el neurólogo inglés John Hughlings Jackson, pero es de todas maneras muy cierta. A Trump, como a López Obrador, le gusta poner motes insultantes a sus críticos y rivales. Esto ayuda también a disminuir la estatura de quienes no los siguen ciegamente. A Kamala Harris la llama “Laffin’ Kamala”, haciendo burla de sus sonoras carcajadas. Hace unos días el equipo de campaña de Trump divulgó el señalamiento: “Kamala Harris es una broma como lo es Biden. Ha sido la facilitadora de ‘Crooked Joe’ todo este tiempo”. “Corrupto Joe” es uno de los apodos de Trump al actual presidente Biden, a quien también ha llamado “Sleepy Joe” y “Slow Joe”. Hillary Clinton, su rival en 2016, era “Crooked Hillary” o “Crazy Hillary”; Nancy Pelosi, era “Nervous Nancy”. A Marcelo Ebrard, secretario de relaciones exteriores de México al inicio del gobierno de López Obrador, Trump no le tenía un mote especial, porque no se acordaba de su nombre, pero en varias ocasiones declaró en son de burla que, después de que Ebrard le dijo que México no podía usar soldados mexicanos para impedir el acceso de migrantes centroamericanos a Estados Unidos, regresó humildemente y aceptó esa exigencia después de que Trump amenazó con cerrar la frontera con México. Trump no ha insultado públicamente a López Obrador. Al contrario. Según Ildefonso Guajardo, a quien le tocó la primera parte de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el entonces presidente se refería a AMLO como “Juan Trump”. No era un insulto, sino un reconocimiento, porque el narcisista Trump “Se veía en él como si fuera un espejo”. El gusto y la frecuencia con la que López Obrador descalifica a sus rivales es indicativo de su cercanía de temperamento con Trump. Para AMLO, efectivamente, quienes lo critican son conservadores, corruptos, fifís, neoliberales y muchas cosas más. Quien piensa diferente debe ser insultado. En contraste, Felipe González, un verdadero estadista, presidente socialista del gobierno español de 1982 a 1996, solía decir que muchas de las reformas que logró, y que permitieron a España un salto cualitativo en su nivel de vida, fueron posibles gracias a que había tenido una buena oposición. El primer paso para construir políticas positivas con una oposición es tenerle respeto. Nadie puede lograr acuerdos si lo primero que hace es insultar a quien se sienta a dialogar. |
23 julio, 2024
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D.n Enrique Gómez Orozco escribió en (23/07/2024) ♦ El precio de una elección ♦ L a verdad salió el lunes por la mañana cuando la prensa norteamericana informó que a Kamala Harris le habían llegado 81 millones de dólares el domingo para su campaña. Un récord si tomamos en cuenta que Biden aventó la toalla después del mediodía. El lunes a mediodía Kamala recibió otros 40 millones. La sorpresa es que unos 880 mil donantes individuales abrieron la cartera en apoyo a la vicepresidenta. A Biden lo doblaron cuando los votantes y los comités del Partido Demócrata le levantaron la canasta. Después del debate fatal con Trump, el ánimo se apagó. Más allá de las recomendaciones de colegas y amigos de retirarse, el golpe fue que no tendría dinero para competir. Comprendió que estaba acabado. En Estados Unidos hay una democracia monetizada. Según la organización “USA Facts”, la campaña presidencial de 2024 costará unos 10 mil millones de dólares entre los dos partidos. Los ciudadanos y los grupos de interés participan y votan con su dinero. Un ejemplo sencillo es la participación de una asociación de mujeres afroamericanas llamada “Win With Black Woman” (Gana Con Mujeres Negras) que donó 1.6 millones en un día para Kamala. Cierto que los grandes empresarios presionan con aportaciones multimillonarias pero los ciudadanos, en lo individual, donan con gusto por su candidato y partido. Esto es una buena lección para la oposición en México. Cuestión de recordar. El PRI duró 70 años en el poder porque tenía a su disposición todos los presupuestos, el federal, los estatales y municipales, aparte del dinero de las paraestatales y sus sindicatos. El PAN y los otros partidos apenas tenían para pagar la renta de sus oficinas. Si revisamos la pasada elección presidencial del 2 de junio, Morena arrasó porque tuvo a su disposición cientos o miles de millones de pesos para la campaña. Además de apoyos en programas sociales (electorales) por unos 360 mil millones de pesos. Fue una ingenuidad pensar que Xóchitl Gálvez podría vencer en una campaña totalmente desigual. En una elección de estado. El PAN y el PRI le regateaban unos cuantos millones y, como ejemplo, el PAN le negó apoyo por pura mezquindad. El resultado fue un retroceso que le costó la mayoría en el Congreso y casi la gubernatura. Para fortuna del blanquiazul, Diego Sinhue sacó el colmillo y la cartera del presupuesto y con las tarjetas rosa compensó un poco el diluvio de apoyos federales. Sabemos que eso iba en contra de los principios y valores de Acción Nacional. Apoyos, acarreos, tortas y lonches eran criticados por ese partido hasta que descubrió que su existencia dependía de actuar con pragmatismo. El problema es que el uso de los fondos públicos en corruptelas y desvíos para campañas, rompe con la mentirosa promesa de luchar contra la corrupción. Un funcionario que pasa la charola entre contratistas del gobierno con el pretexto de “apoyar al partido” puede sacar otro tanto para él. Todo se pudre. El crimen organizado tiene controlados a muchos gobernadores y alcaldes a quienes les ha entregado plata en lugar de plomo. Quienes no pactan tienen el riesgo de morir como fue el terrible destino de Milton Morales Figueroa, uno de los brazos fuertes de Omar García Harfuch. Regresamos a la elección de Estado. La oposición tiene que comprender que se necesitan recursos para competir. |
22 julio, 2024
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D.n Armando Fuentes Aguirre escribió en (22/07/2024) ♦ Sumisión ♦ E l presidente (con minúscula) López Obrador llegó en su trato con Trump a extremos de sumisión que a muchos mexicanos nos avergonzaron. Ahora ese hombre deslenguado, ofensivo, mentiroso, injuriador (hablo de Trump) se jacta de haber hecho y deshecho con Ebrard, el personero de AMLO, y de haber obtenido del gobierno mexicano todo lo que a su representante le exigió con malos modos. Por su parte López no tiene sino expresiones melosas para el insolente magnate norteamericano, que en buena parte finca su campaña en atacar a México y a los mexicanos. De nada sirve que nuestro país sea el principal socio comercial de los Estados Unidos. El poderoso vecino sigue viéndonos como su patio trasero. Desgraciadamente dependemos de él hasta para comer, y nada podemos urdir a fin de arrancar a políticos como Trump respeto y cortesía. Los mandatarios mexicanos del tiempo de la Guerra Fría contaban con el fantasmón del comunismo. Los yanquis temían que tratar mal a México lo inclinara hacia la URSS, y se cuidaban de enemistarse con nosotros. Ahora ya no existe ese recurso. Pero está China. No entiendo mucho de política internacional —y no me explico nada de la política nacional—, pero me atrevo a pensar que si estrechamos nuestros lazos comerciales con esa nación de Oriente, que emerge como amenazante rival económico de Estados Unidos, podremos obtener una mejor consideración de nuestro incómodo vecino. Mientras tanto, y después de los nuevos insultos del boquiflojo, majadero y baladrón Trump, hemos de decir lo mismo que Rodney Dangerfield, aquel excelente comediante norteamericano: “I get no respect”. |
21 julio, 2024
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F. Bartolomé escribió en (21/07/2024) ♦ Templo Mayor ♦ V AYA irigote se armó con el discurso en el que aparentemente Donald Trump insulta al próximo secretario de Economía, Marcelo Ebrard. Y ES QUE, justo después de ofrecer su muy particular versión sobre la negociación que hubo con México para que militares vigilaran la frontera durante su mandato, el republicano se refirió a una “persona estúpida” y aseguró que tenía un coeficiente intelectual de 50 o 60. LAS REDES sociales ardieron asegurando que Trump se refería al ex canciller mexicano, quien se puso el saco, se dio por aludido y respondió en su cuenta de X que el candidato presidencial de EU no lo intimida. HASTA Claudia Sheinbaum se subió al ring y en la misma red social calificó el lenguaje de Trump como soez, defendió a su designado en Economía y le recordó al político estadunidense que México es libre y soberano. NOMÁS que, si se escucha con cuidado lo dicho por Trump —quien tampoco es que sea muy claro en sus discursos en los que brinca de tema en tema sin hacer pausas—, a quien realmente insultó y de quien se burló fue ¡del presidente Joe Biden! ESO SÍ, de que se burló de México y dejó en ridículo las negociaciones con Ebrard, eso que ni qué. PERO MAL comienza el baile cuando en la primera danza y antes de que suene la música ya se andan repartiendo pisotones. |
20 julio, 2024
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D.n F. Bartolomé escribió en (20/07/2024) ♦ Templo Mayor ♦ P UEDE VERSE el vaso medio lleno o medio vacío. Más allá de la ya conocida retórica antimigrante de Donald Trump y su promesa de cerrar la frontera con México y seguir construyendo muros, su discurso ahora se centra en impedir la instalación de armadoras chinas en territorio mexicano. ES DECIR, que su pleito es contra China y el pretexto es México, por lo que nuestro país no es el primer foco de sus dardos sino la potencia asiática. PERO UN POTENCIAL conflicto comercial entre EU y China en el que nuestro país se quede como el convidado de piedra puede generar serios daños para la llegada de inversiones extranjeras y para la instalación o crecimiento de polos de desarrollo en varias entidades del país. ESO SIN contar con que los autos de origen chino que se pretende hacer llegar a Estados Unidos, si no cruzan la frontera, podrían saturar el mercado mexicano y afectar a compañías automotrices estadounidenses, europeas, coreanas y japonesas que llevan años produciendo y vendiendo en México. SERÁ interesante ver qué está planeando el equipo del próximo titular de la Secretaría de Economía, Marcelo Ebrard, si el candidato republicano vuelve a la Casa Blanca. Al menos el ex canciller ya tiene experiencia en eso de las trumpadas. |
19 julio, 2024
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D.n Armando Fuentes Aguirre escribió en (19/07/2024) ♦ Gente de empresa ♦ B ienvenidos los inversionistas extranjeros, sí, sobre todo los norteamericanos. Pero lo que México necesita no es atraer usureros, sino lograr que vengan empresarios. En buena parte por causa de los especuladores del exterior estamos afrontando los graves problemas económicos que ahora nos agobian. Los dólares que aquí vengan deben estar aplicados a la producción de bienes y de servicios, no al simple cobro de jugosos réditos. Necesitamos gente de empresa, no rentistas. El problema es que México fue convertido en paraíso de especuladores. Estos, cuando otrora fallaron sus expectativas de ganancia considerable y fácil, reaccionaron violentamente contra México y calificaron a sus funcionarios de mentirosos y defraudadores. Los aventureros monetarios quieren lucros enormes y sin riesgo. Damos la bienvenida al dinero del exterior. Ciertamente lo necesitamos, quizás ahora como nunca. Pero ese dinero debe servir para generar empleos, no para generar intereses. La legislación sobre inversión extranjera ha de atraerla, pero ha de mirar sobre todo al bien del país... |
18 julio, 2024
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D.n Sergio Sarmiento escribió en (18/07/2024) ♦ Segundo tirador ♦ «La liviandad a la hora de repartir acusaciones desde el máximo poder ha alcanzado alturas —o bajezas— nunca vistas en el México moderno». María Amparo Casar E l atentado del 13 de julio contra Donald Trump le ha servido al presidente López Obrador para revivir una de sus viejas obsesiones, el asesinato de otro Donaldo, Colosio. En este, como en otros temas, AMLO sigue al pie de la letra los principios de propaganda de Joseph Goebbels: repetir constantemente unas cuantas ideas, dar solo un lado de los argumentos, criticar siempre a los opositores y escoger a un enemigo para vilipendiarlo de manera sistemática. AMLO ha preferido seguir sacando raja política: “Creo que ayudaría mucho —dijo el 15 de julio— que el poder judicial resolviera sobre la apelación que hizo la Fiscalía [General de la República] acerca de la orden de aprehensión del segundo tirador en el asesinato de Colosio, sin que esto signifique que ya es culpable”. La presidenta electa Claudia Sheinbaum repitió fielmente: “Es un asunto que tendría que definir la fiscalía, pero recuerden que hace poco habló del segundo tirador, incluso de su vínculo con García Luna. Obviamente es muy importante que eso se conozca y que esto que encontró la fiscalía continúe investigándose”. La tesis del segundo tirador en el caso Colosio es muy vieja, pero fue descartada por las pruebas periciales. Jorge Antonio Sánchez Ortega, el exagente del Cisen al que hoy la FGR y el propio presidente quieren convertir en el segundo tirador, fue detenido en Lomas Taurinas la tarde misma del asesinato. Tenía manchas de sangre de Colosio en la chamarra y dio positivo a la prueba de radizonato de sodio, lo cual sugería que había disparado recientemente un arma de fuego. Se le dejó en libertad, sin embargo, cuando se demostró que los dos disparos contra Colosio los había hecho Aburto con una pistola Taurus calibre .38 especial. Esta tenía dos casquillos percutidos. El primer proyectil atravesó la cabeza de Colosio y salió volando, nunca se recuperó. El segundo, que entró en sedal por el vientre, se encontró en el suelo donde cayó el candidato; se comprobó que era de la Taurus. Los dos disparos se hicieron a corta distancia. Los videos muestran a Aburto cuando hace el primero. El otro fue inmediato, pero Sánchez Ortega no se encontraba cerca de Colosio. Ayer López Obrador regresó al tema: “En el caso del asesinato del candidato Colosio, ¿se acuerdan que hablamos de cómo un juez niega la aprehensión? Pues ya tengo el informe de la Fiscalía en donde se está esperando una resolución. Se presentó un recurso de queja y el juez no quiere resolverlo”. En realidad, no sorprende la negativa: las periciales demuestran que los dos disparos los hizo Aburto con la Taurus. A AMLO, sin embargo, no le interesan ni las pruebas ni los videos, solo que Sánchez Ortega trabajaba como agente del Cisen y Genaro García Luna, a los 26 años, “era subdirector de operaciones del Cisen, precisamente en el final del gobierno de Carlos Salinas de Gortari”, como dijo el 3 de febrero. Fiel a la doctrina Goebbels, sugiere que dos de sus villanos favoritos, García Luna y Salinas, participaron en ese asesinato hace 30 años, aunque no haya pruebas. Con razón le molestan tanto los jueces independientes. Fiel a la doctrina Goebbels, sugiere que dos de sus villanos favoritos, García Luna y Salinas, participaron en ese asesinato hace 30 años. |
17 julio, 2024
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D.n Sergio Sarmiento escribió en (17/07/2024) ♦ Un tren importante ♦ «El fanatismo viene de cualquier forma de ceguera elegida que acompaña la defensa de un solo dogma». John Berger E ste 15 de julio el presidente López Obrador, supuestamente ajeno al comercialismo, utilizó la mañanera para anunciar el Tren Maya. “Queremos hacer la promoción, invitar en primer lugar a los mexicanos, a nuestros paisanos mexicanos del país, los que están en el extranjero, en Estados Unidos, invitarlos porque es algo único, maravilloso, que no lo van a disfrutar, no lo van a ver, en ninguna parte del mundo.”. El presidente lo ha llamado “el proyecto ecológico-turístico-arqueológico más importante del mundo”. Este lunes repitió la frase el director general del proyecto, el general Óscar David Lozano Águila. ¿Es realmente el Tren Maya el proyecto turístico más importante del mundo? Sin duda es uno de los más costosos. Se presupuestó en 120 mil millones de pesos, pero cerrará en más de 500 mil millones, aunque no sabemos porque, a pesar de ser una obra pública, el gobierno ha ocultado la información por razones de “seguridad nacional”. El proyecto empezó a construirse sin estudio de factibilidad económica y sin un trazo definitivo. No se necesitaba un estudio para saber que perdería dinero, ya que casi ningún tren de pasajeros es rentable, pero aun así el estudio es un requisito para cualquier empresa o gobierno responsable. Los costos se inflaron por los cambios de trazo y ubicación de estaciones. Quizá tiene razón el presidente: “en ninguna parte del mundo” podrá verse un proyecto tan costoso y mal ejecutado. ¿Es importante en pasajeros transportados? En 205 días de operaciones hasta el 11 de julio se han transportado 246 mil pasajeros, 1,200 diariamente. Muchos más se mueven todos los días en autobús. Un pasaje de Campeche a Cancún en el Tren Maya cuesta 1,166 pesos en clase turista y 1,862 en premier; un boleto de autobús, 1,072 pesos, con más salidas y con llegadas y terminales en el centro de las ciudades. Las estaciones del tren están alejadas y requieren un taxi, que en Cancún puede costar más que el traslado desde Campeche. Si los 1,200 pasajeros pagan en promedio 1,500 pesos están generando un ingreso de apenas 1.8 millones diarios. Esto no cubre ni una fracción de los gastos de operación. ¿Cuánto tiempo pasará a este ritmo para amortizar la inversión? Suponiendo que no hubiera inflación ni costos financieros, 761 años. Además, el subsidio al precio del pasaje constituye una competencia desleal contra los autobuses que recorren esta ruta. ¿Es un buen proyecto ecológico? Representa en realidad la mayor destrucción ecológica registrada en la historia del sureste de México. De la promesa del presidente de que no se cortaría ni un árbol, hemos pasado al reconocimiento de que cuando menos 7 millones han sido talados hasta 2023. Habría que sumar los que se han cortado después, pero el gobierno no ha divulgado la información. Tampoco sabemos qué ha pasado con la madera. Los pilotes de cimentación en la zona costera, por otra parte, han perforado cenotes y afectado un ambiente muy delicado. ¿Ha sido un buen proyecto arqueológico? Hasta donde podemos ver, pese a la opacidad ordenada por el gobierno, sí se han realizado trabajos de rescate; pero la prisa impuesta por AMLO es tanta que seguramente ha habido destrucción que las autoridades han ocultado. El presidente ha querido hacer del Tren Maya un emblema de su gobierno y lo ha logrado. El proyecto es hoy un ejemplo para el mundo de cómo una obra faraónica y opaca, mal planeada y ejecutada, puede dejar a las generaciones futuras con una sangría económica y una dolorosa devastación ecológica. |
Opinión
También 'carrancearon' a la ínclita "Ministra del pueblo" Sin rodeos Diego Fernández de Cevallos ...
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